Tranquilo y apacible. Relajado por el ambiente aunque la cabeza lo circuncida completamente todo. Se avecinan cosas y estoy preocupada. Pero prefiero entretenerme con el entorno, verles hacer sus cosas, tan independientes ya, mirarles simplemente porque hoy es un día especial y estamos aquí, cada un# en su lugar y en su universo propio, compartiendo mesa y charla y anécdotas. Mucho se habla del diálogo y no sé si lo he ido practicando a menudo [¿no estaba muy ocupada para eso?]. Pudiendo marcharse, optaron por quedarse. Y yo por tumbarme al sol y a escuchar el piar intenso de los pájaros en el centro de la ciudad. Puede parecer mentira pero recientemente leí un artículo que contaba que estudios demuestran que los pájaros urbanos se ven obligados a desgañitarse para ser oídos por los de su especie por encima de los ruidos habituales de tráfico y obras, por ejemplo. Pobres bestias... El caso es que en mi barrio hay uno que tiene la costumbre de piar como un energúmeno a eso de las 5 de la mañana. Claro, fácil ser despertada; imposible casi volver a retomar los sueños; buen momento para empezar el día, con excusas...
No sé si sonará demasiado dulzón pero sí sé que nadie nominará este lugar por casi nada, mucho menos por la calidad de la siguiente frase: y es que este fin de semana, en casa, con mis descendientes, he sido feliz. Les hice llegar mi reconocimiento y gratitud por eso. Y creo que tiene la trascendencia suficiente para que quede aquí y pueda recordarlo en algún momento del futuro...
jajajaja y ese pájaro de qué especie es??? pordios!
ResponderEliminardía especial del de ayer. sí sra .
:)
Mizar