domingo, 24 de marzo de 2013

Hay cosas que no se preguntan...

Llueve a ratos, los fuegos funcionan sin descanso, la humedad y el próximo vuelo en cuatro días. Tiempo familiar y de convivencia. Y de palabras escritas despacio y leídas con dificultad. Y músicas compartidas. A veces la comunicación también es un milagro. Recupero sueño y las ganas de hacer, las ilusiones. Nunca me han faltado, nunca. Aunque se hayan cumplido tantas, casi todas, en los últimos tiempos, como si fuera lo normal y no hubiera que reponerlas y substituirlas de tanto en tanto.  Y la mente se va lejos, haciendo planes. Y cerca, proyectando otras novedades que tienen que ver con planos menos verticales, porque una vez es excesivamente poco, hay que sacarse los miedos y volver a empezar...

5 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Tan inhumana me ves, pepa...? :(

      Eliminar
    2. No mujer..pero a veces compramos una coraza tan cerrada que nos olvidamos que hay un músculo que sigue latiendo dentro, lo que pasa que un tic,tac leeeento sosegado,imperceptible a la espera que aparezca una primavera que acelere su marcha, y se note de tal manera que hasta la coraza sobre, y quizás sólo quizás, estes en esa fase...¿o no?

      Eliminar
  2. Lo que nos va haciendo falta es un poco de primavera y un mucho de sol. Y la vida así se ve de otra manera...
    Disfruta lo que puedas.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Yo me muero de ganas de que llegue la primavera, Marilia. Gracias!!! :)

    ResponderEliminar

No serás de l#s que creen que intimido y por eso no comentan nunca, ¿verdad? :) ¡¡Venga!! ¡¡Anímate!!