Somos la media de la suma de las cinco personas con las que más tiempo pasamos.
Eso gracias a las neuronas espejo.
Y yo paso bastante tiempo con alguien que me roba energía, me resta y me hace discutir, haciendo que yo tenga que sostener mis teorías a capa y espada. Agotador, por cierto.
Total, para sentirme ayer que “siempre quieres tener la razón”. Y tú? Le respondí. Si no quisieras tenerla, no discutiríamos. Ninguno pensaría y estaríamos de acuerdo!
Una broma, vamos.
También he recordado que somos la suma de nuestras decisiones.
Inevitable repasar la vida, releerla, y llegar a conclusiones, seguramente precipitadas. Que es de la manera en la que yo tomo las decisiones, precisamente.
En fin. Dejo este par de frases sabias para reflexionar y recordarlas si dentro de unos años releyera este post, precisamente.