Esta es la que supera por vez primera mi cuarta centena de entradas en este blog. En el otro había más, aunque prefiero no cuantificar. No estoy para grandes celebraciones porque, conocida mi constancia, no me gusta reconocer que estoy en épocas bajas, precisamente y que hay meses en los que no encuentro el espacio para escribir más de ocho veces y publicar con éxito. En meses de treinta días de promedio no es gran cosa, que digamos. Mi entorno anda convulso y se toman enormes decisiones que jamás antes fueron consideradas, ni siquiera yo. Confirmo lo que siempre he sabido. Cosa que está bien, para no caer en dudas inútiles, sino en certezas. Está bien presenciar el reparto de las medallas que tú mism# has ganado. El tiempo [porque todo es cuestión de tiempo] nos coloca a todos en algún lugar. Y la sonrisa siempre acaba por emerger serena entre mi mentón y la base de mi nariz, esa que tiene tanta personalidad. Por el tamaño, por ejemplo. Porque siempre hay evidencias que surgen o que flotan o imposibles de silenciar, de la misma forma que sucede que los papeles acostumbran a tener pies porque van de lugar en lugar y los leen [sobre todo los más importantes y confidenciales, naturalmente] los únicos cuya existencia debían ignorar. Hay días intensos y hay otros más de tedio. Parece que juego en la liga de los primeros, soñando en que acabe la temporada...
¿Un poco de tedio sparkling? ¡Mira que lo mismo te aburres! ¿mejor un término medio entre una cosa y la otra, no? Juegas de catcher parece ser...
ResponderEliminarUn beso chata ;)
Parece que por esa liga no anda Guardiola.
ResponderEliminarPor partes.
Que tu nariz tiene personalidad es evidente.
Que en todo lo que cuentas sólo falta Al Pacino, también.
Que hay papeles con pies y cartas infinitas, por supuesto.
Que sabes poner sonrisa de póker y esperar, pues claro.
Que tienes abandonado el blog, esto es de cajón de madera de pino.
Un beso, escritora.
Muy buen comment, silbante. Gracias por las reflexiones... :)
ResponderEliminarVictoria: veo que no me ves en la liga de las ganadoras. Snif. A todo lo demás... Mastercard. O, lo que es lo mismo, la boca abierta. Besos.