martes, 20 de octubre de 2020

Hábitos, costumbres...

Estamos empleando con asiduidad palabras nuevas y nos acostumbramos. Cambiamos rutinas y dejamos de hacer, con marcada resignación. Nuestros universos se reducen un poco cada día y el contacto es más escaso. No hay mucho contra lo que rebelarse y vamos aguantando.

En mi caso, muta mi carácter notoriamente impaciente, exigente y activo. Soy, probablemente, una sombra borrosa de lo que fui. Veo pasar los meses y las oportunidades y las ganas. Acepto, simplemente. Y proyecto.

Siempre he necesitado tener planes a corto, viajes a medio y un proyecto de vida, a lo lejos. Soy simple, al fin y al cabo. E intento orientarme, ahora que cuesta tanto tener uno solo de los tres objetivos. Busco mi lugar, como todos. Y me repito mantras del tipo "todo pasará", "queda un día menos", "volverás a...".

Recupero la mirada perdida a contraluz observando un ramo de margaritas amarillas sobre la mesa del salón que ahora es una oficina, mientras sueño...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No serás de l#s que creen que intimido y por eso no comentan nunca, ¿verdad? :) ¡¡Venga!! ¡¡Anímate!!