jueves, 29 de octubre de 2015

Retos...

Si. Desde tu advenimiento la vida se me ha llenado de retos.

Ahora quiero ser la primera en casi todas las cosas, en crear sentimientos, vínculos, proyectos y futuros. Excusas para que el tiempo pase y podamos compartirlo, más allá de cualquier obligación que nos separe, como ahora. Cada día, cada noche.

Me apetece enseñarte el trozo de mundo que conozco y, sobretodo, descubrir todo lo que me falta. Contigo. Y verte reir con lágrimas en los ojos, explotando de alegría y de felicidad. Saber que intentas ganar por todos los medios, en todas las cosas que hacemos. Ver tu cara cada vez que lo consigues.

También me gustaría sorprenderte con una palabra, el silencio adecuado o la caricia en el punto justo. Sabores nuevos. Quizá tenga que demostrar algunas cosas, todavía. No quiero dar pasos en falso y me apetece tenerlo todo bajo control, que nada me altere y caminar contigo. Cruzar la ciudad solo para ir a por algunos de tus besos, para que me abraces, tardar dos minutos en desnudarte y quedarme en silencio mirándote. A los ojos. A tu sonrisa. Tu piel.

Desde que llegaste a mi vida, la llenaste de sol y de risas y de ilusión... Y de franjas. Que son un reto enorme...!

lunes, 26 de octubre de 2015

Improvisamos una cama en el sofá...

Nos construimos una cama en un sofá, al que quitamos los grandes cojines de la espalda y los colocamos en vertical para hacer más amplio el espacio. Nos cubrimos con las mantas y apagamos todas las luces. Solo nos quedó el fuego y una lista de canciones llamada Calmmm. Sonaron todas hasta que acabaron y el silencio absoluto nos pilló a oscuras y con las llamas apagadas. Las de la chimenea, quiero decir.

Me pasé la noche abrazándote y, ya de madrugada, decidí continuar, comenzar el descanso, en la cama. No contaba con tus miedos y tu desconocimiento del lugar, así que fue un regalo que decidieras seguirme y continuar abrazándome. Tengo agujetas en todas las extremidades y articulaciones.

Podría ser por culpa de la risa... Podría ser. Tantas veces como han sobrevenido los ataques, intensos y tremendos, adolescentes y primarios, liberadores y relajantes, por sorpresa y cualquier cosa. Una delicia vernos llorar...

sábado, 24 de octubre de 2015

Fuego, mantas y tú sonriéndome...

El fuego crepita, enorme. Duermes en mi regazo. Respiras intensamente, en un ritmo perfecto. Sonríes en pequeño y se nota que estás bien bajo mis caricias, sobre mi manta de cuadros, debajo la tuya. Nos espera una cena aqui al lado y sé que no sabrás qué elegir de la carta porque todo es demasiado tentador. Estudio y me gustaría dormir. Presiento que la noche será muy corta, estarás a tope de energía y mañana nos escuecerán los ojos al despertar. El fuego se refleja en tus rizos dorados, en tu piel morena, en tus facciones perfectas. No suena Cohen. Solo el silencio de este lugar a esta hora, hoy precisamente...

jueves, 22 de octubre de 2015

Dime que todo está bien...

Si, necesito saber que todo está bien, que hay orden y que no existen las prisas. Que la tranquilidad está gobernando tu agenda y que las preocupaciones son razonables. Sólo eso.
 
Necesito saber que estás procesando la sorpresa y el descubrimiento, tu propio descreimiento, y que normalizas situaciones nuevas que te sorprenden cada día.
 
Prohibiría todas las cosas inquietantes, aquello que pueda desestabilizar el momento y, egoístamente, interceptaría la bala en caso de disparo. Como en las películas comerciales.
 
Porque se acabaron las dosis de sufrimiento que alguien ha repartido tan mal. Porque tus sonrisas tienen que embellecer este mundo. Porque quiero seguir mirándote en azul. Y abrazarte cuando te instales en mi regazo y me observes en silencio, con una media sonrisa y los labios relajados...

miércoles, 21 de octubre de 2015

A mi me ha faltado noche...

Acabar de digerir lo que ingeriste varias horas antes e intentar que cuerpo y mente coincidan en el mismo lugar, en plenas facultades, a pesar de los insomnios previos y sostenidos en las noches. Improvisar una nueva ingesta con las limitaciones recién impuestas, entre papeles, notas y bolígrafos rojos. Negociar las bases futuras desde la distancia para que eso no fisure jamás la confianza, porque son dos cosas distintas, que hay que olvidar y dejar de lado rápidamente. Contarse, reportarse, revisar lo del pasado y soñar el futuro que ha de venir.
 
Frío en la habitación bajo un edredón y las ventanas abiertas, que se hagan más de las tres y sentir que ha faltado tarde, ha faltado noche, ha quedado tanto por abrazar, sigue faltando sueño, tanta piel que pasear y contenedores de besos, tan difíciles de dar sin obtener respuesta inmediata, reacción a la acción, al sentimiento.
 
Es difícil caminar en el vértice del 22 sin inmutarse ni verse afectada, disimular que no importa, que la mente no se escapa a esos otros lugares e imagina y se equivoca, con seguridad. Una se propone seguir con dignidad y seguridad y sin embargo a veces asoman todos los miedos. Alguien, cada vez, levanta la mano y recoloca todo en su lugar de origen, transmitiendo la fuerza y la confianza, la serenidad de lo que fue alguna vez y ya nunca más. Y el abrazo tremendo que lo cierra todo, los temblores, los estremecimientos. Y los suspiros y los susurros...

lunes, 19 de octubre de 2015

Y esas llaves, Matarile...???

Sé dónde están las llaves desde hoy. Del lugar refugio, inesperado, en el que apetece esconderse de todo lo que sucede fuera. Dónde mirarse borroso de muy cerca y sencillamente reír. Un poco, nada, todo. Dormir apenas. Volver a una añorada adolescencia y alejar ruidos y silencios, con todo lo aprendido dentro de la bolsa que cargamos en la espalda.

Azul. Completamente azul. Y pintar la piel increíble con el primer rotulador con el que me encuentro, que es de idéntico color. Y jugar a ser creativa, improvisando iniciales ajenas. Yo, que siempre fui torpe y vergonzosa pintando... Era un bolígrafo azul, en realidad, y una A, sin significado aunque coincida con otro nombre y otra cara y otras manos, claro. Y dibujar un corazón como antiguo, de los de Cupido, con flecha e iniciales propias, cruzadas, reales. De los que antes se tatuaban los marinos, antes de que llegaran los infinitos que llevan todas en la piel, para siempre, intercambiables y borrables, también. Y perfilar tu pezón izquierdo paseándolo varias vueltas y que te estremezca porque la punta del boli te despierta cosquillas. Y que no importe nada y solo nos ataque la risa.

Yo me tatúo tu mirada, como se graban los momentos irrepetibles, los inolvidables y los irresistibles. A fuego, con fuerza y convencimiento. Y tu sonrisa, tu fuerza y tu forma de besar. Los abrazos y el tacto de los lunares de tu piel. Porque tu alegría es imposible de tatuar...

domingo, 18 de octubre de 2015

Comienza La Etapa, señoras...!

Todo sucede por una o varias razones y es el tiempo quien nos cuenta el final de la historia. El principio lo conocemos, lo diseñamos, lo provocamos.

Y solo hay que tener un poco de paciencia. El cosmos lo coloca todo en su lugar.

No se trata de que me guste estar con quien me acompaña en el camino por su forma de ser. Me gusta como soy cuando descubro que ese es el origen. Y cuando estoy bien, cuando la persona es la correcta, de pronto fluye la vida amable y regreso en el mejor modo.

Todo lo que nunca fui ya no existe. Como tampoco existe quien lo motivó porque hice limpieza, revisé el pasado sin gran interés y borré errores, recientes al menos.

Ha comenzado La Etapa, señoras. Mi momento para devolver todo lo que recibí, para seguir siendo quien fui antes de ser maleada, maltratada y humillada. Fin del pasado. Regresa [modestia aparte] la versión buena, hasta mejorada, con la fuerza de mil caballos corriendo al galope tendido, sin montura, en manada por un desierto verde de Mongolia, las crines brillantes y revueltas.

Es el momento de que sigan llegando aquellas cosas que siempre soñé para vivirlas como si nos fuera en ello la vida...

jueves, 15 de octubre de 2015

Azul Ibiza...

Hay ojos líquidos y transparentes como el agua de una cala de Ibiza. Y miradas azules y limpias que observan de frente y sin miedo, con fuerza. Hay voces sordas que surgen del iris y diálogos mudos que se alargan suavemente en el tiempo, sostenidos, dulcemente. Y largas caricias en la mejilla y una piel llena de lunares, suave, suave. Y rincones escondidos, abrazos estrechos y paseos por tu piel, dando rodeos...

miércoles, 14 de octubre de 2015

Rayas y el verano tardío...

Un par de baños de mar. Y sol y dos caminos de ronda. Cielos y puestas y tiempo y modo cloud on. 

El agua fresca y algo de crowl. Pelotas de colores, pequeñas. El mar en calma, tumbada escuchando el romper de las olas pequeñas en el silencio del nadie que comparte el paraíso. Sol en la cama a media tarde y más agua porque somos mar. Y manos de perito recorriendo mi cuerpo, con la experiencia acumulada durante décadas, descontracturando. Lineas y rayas. Saltos en la arena. Cambios y normas, avisos y lecciones de modos improvisadas en situaciones extremas difíciles de preveer, que pillan con el paso cambiado...

viernes, 2 de octubre de 2015

Mi vida y las maletas...

Este septiembre venía cargado y eso no es una sorpresa, porque estaba previsto. Mucho aeropuerto y decenas de taxis, cabeza gacha o saliendo casi por la ventana. Frío y lluvia, calor y sol. Un poco de todo para entretenerme y enriquecer lo que voy viviendo. Huelgas de tren y cambio de billete y de medio de transporte. Ya soy mayor para jugármela quedándome como tirada en una sala de espera y sin horario ni expectativas.

Largos pasillos recorridos sin grandes prisas. Otra de mis novedades: ocuparme del estrés, gestionarlo y evitarlo, dejándolo lejos, atrás. Y, sin embargo, la valoración: en los últimos diez años he tenido tres maletas de cabina, coincidiendo con diferentes etapas. Una negra, una roja y una azul, todas del mismo fabricante.

Ahora llevo una corporativa, ligera, porque arrastrar esa prolongación con ruedas de mi ser que empieza al final de mi mano izquierda me ha distendido el ligamento del codo y las molestias aumentan. El tema preocupante no es, por supuesto, el dolor [anecdótico] si no el hecho de que no me despego de la maleta y de medio armario para atender las diferentes circunstancias.

jueves, 1 de octubre de 2015

Yo no la conocía, en mi línea...

Y aún la conozco poco. Pero me ha gustado, al menos, esta canción...
Seguiré estudiando el caso. El puñetero método del caso que me va a matar...

La vida es duda...

Taxis. Uno tras otro. Agenda, petada. Caras nuevas y otros roles. Sol y césped impecable. Algunas bolas y agujetas. Un placaje y sorpresas. Mucho sueño y pocas horas para mi. Huracanes dentro de la cabeza y ruido de fondo, música, cambios. Avances gigantescos y refocalización rápida de casi todo. 

Presiento. Siento. Consiento. Todo a la vez. Busco el silencio como una figura humana en una travesía en solitario por el desierto de Atacama. Proyecto y me alejo para saber cuán lejos debo marcharme, de nuevo, ahora que apenas he regresado aún. 

Construimos etapas a cada paso y sigue siendo excitante, sumamente, esto de vivir...