Te escribo para que no me olvides.
Ni un segundo.
Es la explicación racional.
También te escribo para no olvidarte.
Ni confundirme.
Ni distraerme.
Necesito escribir y mantener el contacto para no rompernos.
No quiero deshacer promesas que no nos hemos hecho aún.
Quiero pensar en ti y que no dejes de pensarme.
Ni por un momento.
Y escribirte poesías que nunca antes supe escribir.
Aunque sean malas, como de debutante.
Pero es que van cargadas de intención y candidez.
Como cuando soy más tímida que nunca.
Quiero recordar tu risa, tu pelo revuelto y tu sorpresa.
Por cada cosa, cada lugar, todos los proyectos.
Los que esbozamos con todo el miedo,
Disimulando las ganas y la impaciencia.
Quiero escribirte letras de verdad,
para que comprendas.
para que comprendas.
Aunque me pase el tiempo redactando mentalmente cómo te abrazaría...
Dos poemas por día es más que un ensayo. Y además, tienen tanto futuro los ensayos...!
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Vic, querida. Eso no son poemas. Es prosa desordenada. Mira que tener que darte yo estas clases elementales, a alguien como tú, poeta y profesora. Manda lo que manda, ¿eh? uffff....!!!!
ResponderEliminarBeso.
Prosa o poema o desorden, como a vos te parezca, a mí me encantan. Un beso
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