Se me acabaron las palabras. Y las ganas de hablar. Creo que es de tanto usarlas, de tanto pronunciar. Muchos años abusando. Se veía venir. Esto no es una queja...
Se me fueron las ganas de sentarme a escribir y se me acabó la paciencia. No sé esperar a que regresen. No puedo invocarlas. Nada nuevo que contar, todo lo antiguo [que siempre suena a viejo, a usado, a revisado, a repetido]. Solo lo anterior.
Se instalará el silencio y volveré a leer, sin esperar a que nada regrese. No buscaré palabras ni pensaré más párrafos. Tampoco jugaré con alguna frase que haya llamado mi atención, durante horas, porque no tendré que recordarla para pasarla por el teclado. Ya no será necesario memorizar relatos breves ni el tema de un nuevo post.
Abrimos nuevas etapas apenas sin darnos cuenta, ni tener conciencia. Yo sí. Hoy es un día inaugural...
Supongo que algo bueno traerá, a lo mejor simplemente que es lo que deseas.
ResponderEliminarPero tengo que decir que lo siento.
Lo entiendo, lo he sentido y vivido, lo bonito es que lo llamaes inauguración y no cierre.
Beso, exclusivo.
Ahora iré a ver si es cierto que Lareth vuelve. En ese caso... quizá... sólo quizá... exista esperanza... :) Beso, único.
ResponderEliminarLa esperanza siempre existe. Necesitamos un buen monvimiento sísmico (ahora se llama así) para que todo se revuelva y renazca.
ResponderEliminarBeso, foryuaisonli
Creí que le estábamos llamando crisis... ;)
ResponderEliminarQue no, que esa "palabro" no existe. Repite conmigo...I L U S I Ó N
ResponderEliminar"Deame cuarto y mitad, y si pasa un poco, me lo deja"
:)
¡Qué I L U S I Ó N tu comentario!
ResponderEliminar;)