Aquí se viene a jugar con las palabras. A vaciar nostalgias. A comprender miradas y silencios. A compartir sin disfraces. Con seudónimo pero el alma verdadera...

jueves, 21 de marzo de 2019

Una primavera de vértigo...!!!

Ir a la pelu. De tu perro.
Recibir muchos whats. Son chistes.
Alquilar coche. Para ir a trabajar.
Comprar vuelo + hotel. Una boda.
Próximo viaje transoceánico inminente: fugaz y laboral.
Reuniones nocturnas en restaurantes: business.
Paseo por la playa: me darán un cv.
Mercurio retrógado: problemas con la palabra, regresa el pasado, situaciones surrealistas.
Triplete.
Y así...

miércoles, 20 de marzo de 2019

Vilanova i la Geltrú...

Un cariñoso saludo y un fuerte aplauso a quien sea que se conecta desde Vilanova y se entretiene mucho leyendo las entrañas de este lugar. Igual ni sabe que su servidor está ahí pero yo sí veo que entra desde un iPad. Es un dato.

Besos y burbujas Oo*

martes, 19 de marzo de 2019

Dos tipos de personas...

El mundo está habitado por dos tipos de gente. A ver a qué grupo perteneces. Si:

- eres huérfano
- hijo único
- tienes coche
- adoras viajar
- eres más de Nesquik
- has visto morir a un hermano
- esquías
- sobreviviste a un accidente grave
- elijes VO
- te espabilas por la noche
- eres diplomático
- te han puesto los cuernos
- te casaste
- eres workoholic
- caminas
- te gusta compartir silencios
- abrazas por la espalda
- te han abandonado
- sabes lo que quieres
- conoces el significado de la palabra ‘acúfeno’
- eres generoso
- empático
- viajas con la ventanilla bajad
- no tienes cadáveres en los armarios
- planeas con margen
- colaboras con alguna causa
- duermes serenamente
- eres asertivo
- o dulce
- sufriste la interrupción de un embarazo
- te escapas al mar y a playas desiertas
- tienes dinero en la cartera
- crees en algo
- te han defraudado
- sobreviviste una Cruz Cósmica
(putokarma)
- vives pegado al móvil
- no fumas
- lloras porque sí
- necesitas vitaminas
- eres honesto
- vas al gym
- hablas idiomas
- tienes más de mil contactos
- te gusta ayudar
- has estado en la UVI
- adoras instagram y sus histories
- piensas en un próximo viaje
- tienes tranquila la conciencia
- e hijos
- caminas bajo la lluvia sin paraguas
- te cuidas mucho, mucho por dentro
- lees novelas en inglés
- organizas tu futuro independiente
- piensas en tu primer gran amor
- olvidas el nombre de lugares inolvidables
- has ayudado a alguien en apuros
- no olvidas una cara.

Si fallas cinco o más, no eres de mi equipo. La suma de los diversos resulta en relaciones interesantes. No soy nadie para juzgar. Pero las afinidades molan...

sábado, 16 de marzo de 2019

Sai Baba...

Sai Baba en la India enseña las "Cuatro Leyes de la Espiritualidad"

La primera dice:
"La persona que llega es la persona correcta", es decir que nadie llega a nuestras vidas por casualidad, todas las personas que nos rodean, que interactúan con nosotros, están allí por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada situación.

La segunda ley dice:
"Lo que sucede es la única cosa que podía haber sucedido".
Nada, pero nada, absolutamente nada de lo que nos sucede en nuestras vidas podría haber sido de otra manera. Ni siquiera el detalle más insignificante.
No existe el: "si hubiera hecho tal cosa...hubiera sucedido tal otra...". No. Lo que pasó fue lo único que pudo haber pasado, y tuvo que haber sido así para que aprendamos esa lección y sigamos adelante.
Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en nuestras vidas son perfectas, aunque nuestra mente y nuestro ego se resistan y no quieran aceptarlo.

La tercera dice:
"En cualquier momento que comience es el momento correcto".
Todo comienza en el momento indicado, ni antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en nuestras vidas, es allí cuando comenzará.

Y la cuarta y última:
"Cuando algo termina, termina".
Simplemente así. Si algo terminó en nuestras vidas, es para nuestra evolución, por lo tanto es mejor dejarlo, seguir adelante y avanzar ya enriquecidos con esa experiencia.

jueves, 14 de marzo de 2019

Mis propios planes...

Muyallímitedehacerplanesacompañadaqueacabansiendodeimposiblecumplimiento. Harta. Como tomada de pelo.
Decido mirarme el ombligo y elegir con todas las consecuencias lo que quiero ser, dónde quiero estar y cuál es el camino para llegar.
Confieso que me distraigo mirando atrás y a los lados, descubriendo los vacíos. Pero se pasa pronto y enseguida me disfrazo de sonrisa que no emgaña a nadie porque es una mueca. No es muy útil. Pero es algo.
Viene Vicky Gastelo. Sonrío...

miércoles, 13 de marzo de 2019

Una bufanda en primavera...

Catorce grados y cae una leve lluvia que ni siquiera está mojando el suelo de las calles.

Es día de bufanda. Aunque siga teletrabajando y no haya salido de casa, a pesar de tenerlo previsto y en la agenda. Aunque lleve un fino jersey de punto. Aunque frío no haga.

Pienso en la que para mi es la mejor definición de bufanda: "dícese de la prenda que la abuela le pone a su nieto cuando ella tiene frío". Cierro paréntesis que distrae.

Siempre me hace sonreír, la definición. Aunque hoy no tenga ningunas ganas de hacerlo.

Mi bufanda, hoy, es de otro estilo: como si alguien estuviera presionando con las dos manos y por la espalda mi garganta, ni muy fuerte ni muy suave. Lo justo para que el oxígeno entre con dificultad, como entorpeciendo la respiración normal, algo parecido al ahogo y a la sensación que le acompaña. Y miedo. Y como a traición, sabe.

No sabría decir a qué es el miedo. No soy capaz porque aún estoy reconociendo, mientras trago con poca facilidad, que algo no anda bien y no he empezado a hacerle frente. Es todo reciente, aún. No parece que urja, tampoco. Es, por el momento, un darse cuenta, tomar conciencia, mirar al infinito levantando la cara del teclado y la pantalla y suspirar, despacísimo.

Me sigue costando respirar...  

lunes, 11 de marzo de 2019

Mezcla de sentimientos que me provoca todo...

Todo esto ya no es atribuible al cosmos, ni a las cruces puñeteras. Eso se superó, con algunas bajas de consideración. Con metamorfosis y transformaciones, visibles e imperceptibles. Ambas dos.

Reflexiono. Intento comprender. Como en un tutorial de esos de video: cómo sobrevivir a una caída en aguas gélidas por fractura del hielo. Lo primero y casi único es: respira hondo, mantén la calma, que no cunda el pánico. Como si en ese escenario fuera fácil, asumo. Solo, bien abrigado y en medio de un lago congelado en la tundra. Andayá.

Vale. Respiro hondo. Aquí y ahora. Tomo consciencia. Recuerdo otras veces. Se me revuelve todo pero mantengo la calma. Un poco de shock no me lo quita nadie. Otro poco de todo lo inexplicable y algo de por qué. En pequeñas diócesis. Entro oxígeno y lleno pulmones y estómago, repartiendo aire en lugar de bofetadas, como me apetecería. Para eso sudaré, por si puedo sacar por los poros lo que mi boca calla y mi mente quiere gritar. No la dejo. No la dejaré. Me repugnan los reproches porque ya aprendí que deben soltarse en directo, como cuando se retransmite un partido. O callarse para siempre.

Miro al infinito desde la ventana y veo cielo y terrados, alguna antena de televisión, chimeneas modernistas. No cunde el pánico ahora en la protección del hogar. En el futuro es probable que cunda. Mucho. Pero hoy no quiero proyectarme en el más adelante en ese estado, el del miedo, el del la mirada a los ojos de la soledad. Dios proveerá. Supongo. 

No quiero reconocer que nunca aprenderé. Que a fuerza de protegerme de los factores externos me estoy transformando en piedra, ni siento ni padezco, ni extraño ni creo necesitar. Larga lista de experiencias que llevo a cuestas, con la tontería. Entre todas me estáis maleando con fruición. Os pediría que repartierais el juego, en adelante. Por favor. Una apuesta con candidez a que "para siempre" puede ser una opción y de repente...

sábado, 9 de marzo de 2019

Ausencias y cumpleaños...

Las ausencias también cumplen años. Y los vacíos y la nostalgia. Los espacios hueros que van quedando en los árboles familiares.  Y todo eso que compartías, lo que eras solo en ese papel. Y los  meses se deslizan. Un día, solamente porque sí, han pasado cinco años. De repente y por sorpresa. Porque nadie cuenta los días de las ausencias. O muy poca gente. Alguien, tal vez.

Cinco años sin esa sonrisa abierta que capturó la fotografía, sin ese gesto, su timidez ante una cámara, la mirada muy fija a tus propios ojos, su tono de voz y su forma de interpretar la vida, de aprenderla, transitando a su aire y con universos pequeños, entre libros y gafas, música de piano y largos silencios.

Me han recordado sin quererlo que hace cinco años que ya no está y la verdad es que no quería saberlo para no ponerme triste y hundirme hasta las rodillas de nostalgia...

domingo, 3 de marzo de 2019

Cosas que dejamos atrás...

Un cepillo de dientes naranja. Un jersey vintage rojo. Una toalla de ducha, que he lavado hoy. Ropa cómoda y unas zapatillas, que guardé hace días.

Qué tontería... (de post, de recuento, de recuerdo).

Aquí está todo...

Acerca de los datos personales

Mi foto
Si. Claro. Cómo si fuera tan fácil hacer una definición completa y, además, ecuánime de una misma a estas alturas de la vida... Creo que, por lo menos, necesitaría un fin de semana. ¿Hace? ¿Si? :)

Por si se pierde algo...

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
Number of online users in last 3 minutes Number of online users in last 3 minutes